La historia de la Garriga está ligada al termalismo. Con toda seguridad, el Imperio romano debía aprovechar el manantial de agua termal que brotaba a lo que hoy es el centro del pueblo.

Pero la mejor representación de Roma en la Garriga la tenemos en la Villa romana de Can Terrés, declarada Bien de Interés Nacional (BCIN). Puede visitar libremente los baños calientes, pasear por las salas que hace dos milenios pisaban sus propietarios, y también conocer muchísimas cosas sobre uno de los asentamientos rurales romanos más importantes de Cataluña.

En los baños de Can Terrers, sin embargo, no se utilizaba agua termal, sino que el agua se tenía que calentar. La familia propietaria y sus amistades podían disfrutar de un circuito termal parecido al que se puede hacer hoy en día a los balnearios: con una zona de vestidor y salas calientes -incluso una sauna-, hasta terminar en una zona de piscina de agua fría. Todo ello, gracias al trabajo de personas que nunca tendrían acceso a aquella agua que calentaban.

Más info y enlaces:

• Visitas guiadas
• Audioguía de la antigüedad de la edad media
• Oferta educativa, visitas escolares
• Tráiler audiovisual Can Terrers, 2000 anys d’historia en 4 pasos